Existen varios mitos que se han colado en relación al email marketing, minimizando su importancia. Estas ideas han proliferado, en parte, porque algunos agentes no han actualizado adecuadamente sus conocimientos en el área, por lo que no es poco común escuchar ideas incluso de líderes de la industria que no concuerdan con la realidad. Estas son algunas de las más comunes:
Ya nadie usa email marketing
Por si no había quedado claro en la introducción, el email marketing todavía es muy popular. No solo es ampliamente utilizada, también deja muy satisfechos a los negocios. Según Digital Agency Network, nueve de cada 10 consideran este técnica como exitosa.
Correos electrónicos frecuentes = spam
Uno de los grandes temores de utilizar frecuentemente el email marketing es ser catalogado por los usuarios como spam. Sin embargo, la diferencia entre un remitente basura y uno relevante no es la cantidad. Es la calidad. Cuando una compañía envía contenido interesante y bien producido a su audiencia, es menos probable que lo consideren una molestia. Por el contrario, el público empezará a verlo como un servicio, no una técnica de venta.
Siempre es malo cuando se cancela una suscripción
Las compañías tienden a pensar en las bases de contactos únicamente en términos de tamaño. Entre más correos electrónicos se tengan registrados, es más probable cerrar una venta. Y si bien hay un componente de volumen en el éxito del email marketing, no es lo más importante. Cuando una persona decide dejar de seguir a una marca, es un proceso natural. Solo si pasa en grandes cantidades y/o repentinamente, debería haber motivo de alarma.
Hay un “momento mágico” del día para enviar mensajes
Es cierto que hay horas o días donde ciertos públicos tienden a interactuar más. Sin embargo, estas tendencias varían ampliamente entre las industrias, nichos de mercado y hasta de marca a marca. Lo más importante es entender las particularidades de tu audiencia. Lo mejor es experimentar durante varias semanas y tipos de contenido para saber qué acomoda más a tus clientes.
No es bueno tener líneas de asunto muy largas
De nuevo, es verdad que el lector promedio no dedica mucho tiempo a ningún contenido. Sin embargo, la brevedad no es la clave para ganar la atención del público. Es mejor usar titulares atractivos, que despierten la curiosidad de la audiencia, aunque tiendan a ser más largos que el promedio. No importa si superan la ventana de visibilidad en la bandeja de entrada. Es mejor tener una frase larga e intrigante que una reducida pero genérica.
Hay que evitar enviar mensajes repetidos
Otro de los grandes mitos del spam. Siempre que se use con prudencia, no está mal enviar dos o tres veces el mismo documento en una estrategia de email marketing. Hay muchas razones por las que una persona puede dejar pasar un mensaje sin que eso signifique que no haya interés. Obviamente, no se recomienda usar esta táctica en toda la comunicación ni en intervalos muy cortos. Es mejor reservarla para los contenidos más cruciales que quiera transmitir una marca.